Otra historia de amor que une a Edward Y Bella por siempre y para siempre espero que les guste…
Autora: Catalina Valdivia
-----------------------------Capitulo 1. “EL ACUERDO”
“siempre creí ser una persona diferente, siempre pensé en encontrar cosas distintas pero la verdad es que nada de eso sucedió, aun sigo aquí, atrapada en este eterno aburrimiento.”
ese día me levante más temprano de lo común realmente no podía creer que ya había terminado el primer semestre en mis estudios y que en realidad había salido como una de las mas aventajas de la facultad de medicina, si, debía decirlo ya me estaba convirtiendo en toda una profesional, y ahora se acercaban las vacaciones, siempre cuando pensaba en algo distinto no sé un viaje, terminaba por regresar a Forks, mi padre me llamaba todos los días presionándome a visitarlo, ya eran casi 8 meses los que no lo veía y en realidad también lo extrañaba.
Así que empaque todas mis cosas, tome mis boletos y me fui a casa de mi padre, el viaje estuvo como siempre, eterno, Charlie me esperaba.
-Bella, hija
No pude evitar notar en él, la emoción que sentía de verme, me rodeo con un fuerte abrazo
-hola papá te extrañe, hermosos pelos blancos asomaban su cabellera, si era una hecho mi padre estaba más viejo y yo también.
Llegamos a la casa revise mi cuarto, todo estaba tal cual como yo lo había dejado, había extrañado ese desorden único, deje mis cosas y baje a la cocina.
-me sorprendió ver a Charlie, con un delantal de cocina, lo mire extraña
Bella hija se que estas son tus vacaciones y que en realidad no has parado este último tiempo entre estudios y trabajo, así que déjame recompensarte esta noche cocinare yo, ya creo que esto está casi listo.
Dios mío no lo podía creer Charlie cocinando, esto debe ser una broma, pero al poco tiempo me di cuenta que era verdad, me encontraba sentada con Charlie probando una exquisita comida.
Mi padre siempre tenias gestos así de lindos conmigo, eso me hizo recordar que estaba en casa.
Uno de los acuerdos tomados con Charlie para poder viajar en estas vacaciones fue el poder comenzar a trabajar en algo, para juntar un poco de dinero para el semestre entrante, asique me puse a buscar de inmediato, a Charlie le entusiasmo la idea y comenzó a ver trabajos para mí, por medio de sus contactos ya que mi padre es el jefe de policía, siendo conocido por todos, al principio me incomodo la idea pero en realidad lo vi tan entusiasmado que no pude negarme.
Ya llevaba dos días en Forks y nada pasaba con el trabajo, ya me estaba dando por vencida de que encontraría algo en este pequeño pueblo.
Charlie llego muy contento ese día
-bella hija felicitaciones
-¿qué pasa papá?
-acabo de hablar con el doctor carliste cullen lo recuerdas
Algo recordaba, creo que era uno de los mejores doctores salidos de mi facultad, si siempre lo nombraban como un súper héroe, y a la vez lo criticaban por no haber seguido en algún otro hospital prestigioso, si no, haberse quedado en un pueblito tan pequeño como era Forks, según los comentarios el no podía vivir lejos de su esposa e hijos esa era la gran razón.
-si lo recuerdo
-le conté acerca de tus estudios y en realidad…mmm
-¡que pasa!
-te ofreció trabajo
Genial si no podía ser mejor, yo Bella Swan trabajando con el prestigioso doctor Cullen, si ya había sido la envidia de mis compañeros por salir bien este semestre ni me imaginaba como se pondrían cuando supieran esto.
-mmm a mí, yo, emmm no se qué decir, papa no me siento preparada, en realidad tu sabes que llevo recién un semestre en la facultad de medicina, yo no…
-no hija tranquila, no tendrás que ir al hospital más bien el necesita a una persona que le ayude con su hija.
-oh no, no, no de niñera no, no puedo, yo sabía que esto podía suceder, en realidad no podía culpar a mi padre el tenia las mejores intenciones.
-no Bella, no de niñera, su hija tiene 17 años
Oh rayos, menos cuidando a una adolecente con las hormonas locas, esto de verdad no podía ser mejor.
-Eso es mucho peor Charlie.
-hija no te apresures déjame explicarte, en realidad podrás cuidar de ella, como su enfermera Bella ella está muy enferma, es la hija menor del doctor Carlisle, su nombre es Alice mira no sé si la recuerdas.
-mmm
Eso cambiaba las cosas totalmente, una enfermedad y cuidarla total y absolutamente como una paciente, eso realmente cambiaba las cosas.
-piénsalo hija, esto puede ser una muy buena oportunidad además el doctor carliste de inmediato confió en ti.
En realidad eso era mucho mejor de lo que esperaba, trabajar con un paciente, pero porque el doctor Carliste no contrataba a una enfermera realmente titulada para su hija, y no a una estudiante eso sí que me parecía extraño.
-perdóname, papá tu sabes cómo soy de apresurada en las cosas, de verdad tienes razón lo hare pero solo hasta cuando no encuentre otro trabajo ok.
-bueno hija me alegro,
-mañana debes ir al hospital y hablar con el doctor Carliste
“siempre creí ser una persona diferente, siempre pensé en encontrar cosas distintas pero la verdad es que nada de eso sucedió, aun sigo aquí, atrapada en este eterno aburrimiento.”
ese día me levante más temprano de lo común realmente no podía creer que ya había terminado el primer semestre en mis estudios y que en realidad había salido como una de las mas aventajas de la facultad de medicina, si, debía decirlo ya me estaba convirtiendo en toda una profesional, y ahora se acercaban las vacaciones, siempre cuando pensaba en algo distinto no sé un viaje, terminaba por regresar a Forks, mi padre me llamaba todos los días presionándome a visitarlo, ya eran casi 8 meses los que no lo veía y en realidad también lo extrañaba.
Así que empaque todas mis cosas, tome mis boletos y me fui a casa de mi padre, el viaje estuvo como siempre, eterno, Charlie me esperaba.
-Bella, hija
No pude evitar notar en él, la emoción que sentía de verme, me rodeo con un fuerte abrazo
-hola papá te extrañe, hermosos pelos blancos asomaban su cabellera, si era una hecho mi padre estaba más viejo y yo también.
Llegamos a la casa revise mi cuarto, todo estaba tal cual como yo lo había dejado, había extrañado ese desorden único, deje mis cosas y baje a la cocina.
-me sorprendió ver a Charlie, con un delantal de cocina, lo mire extraña
Bella hija se que estas son tus vacaciones y que en realidad no has parado este último tiempo entre estudios y trabajo, así que déjame recompensarte esta noche cocinare yo, ya creo que esto está casi listo.
Dios mío no lo podía creer Charlie cocinando, esto debe ser una broma, pero al poco tiempo me di cuenta que era verdad, me encontraba sentada con Charlie probando una exquisita comida.
Mi padre siempre tenias gestos así de lindos conmigo, eso me hizo recordar que estaba en casa.
Uno de los acuerdos tomados con Charlie para poder viajar en estas vacaciones fue el poder comenzar a trabajar en algo, para juntar un poco de dinero para el semestre entrante, asique me puse a buscar de inmediato, a Charlie le entusiasmo la idea y comenzó a ver trabajos para mí, por medio de sus contactos ya que mi padre es el jefe de policía, siendo conocido por todos, al principio me incomodo la idea pero en realidad lo vi tan entusiasmado que no pude negarme.
Ya llevaba dos días en Forks y nada pasaba con el trabajo, ya me estaba dando por vencida de que encontraría algo en este pequeño pueblo.
Charlie llego muy contento ese día
-bella hija felicitaciones
-¿qué pasa papá?
-acabo de hablar con el doctor carliste cullen lo recuerdas
Algo recordaba, creo que era uno de los mejores doctores salidos de mi facultad, si siempre lo nombraban como un súper héroe, y a la vez lo criticaban por no haber seguido en algún otro hospital prestigioso, si no, haberse quedado en un pueblito tan pequeño como era Forks, según los comentarios el no podía vivir lejos de su esposa e hijos esa era la gran razón.
-si lo recuerdo
-le conté acerca de tus estudios y en realidad…mmm
-¡que pasa!
-te ofreció trabajo
Genial si no podía ser mejor, yo Bella Swan trabajando con el prestigioso doctor Cullen, si ya había sido la envidia de mis compañeros por salir bien este semestre ni me imaginaba como se pondrían cuando supieran esto.
-mmm a mí, yo, emmm no se qué decir, papa no me siento preparada, en realidad tu sabes que llevo recién un semestre en la facultad de medicina, yo no…
-no hija tranquila, no tendrás que ir al hospital más bien el necesita a una persona que le ayude con su hija.
-oh no, no, no de niñera no, no puedo, yo sabía que esto podía suceder, en realidad no podía culpar a mi padre el tenia las mejores intenciones.
-no Bella, no de niñera, su hija tiene 17 años
Oh rayos, menos cuidando a una adolecente con las hormonas locas, esto de verdad no podía ser mejor.
-Eso es mucho peor Charlie.
-hija no te apresures déjame explicarte, en realidad podrás cuidar de ella, como su enfermera Bella ella está muy enferma, es la hija menor del doctor Carlisle, su nombre es Alice mira no sé si la recuerdas.
-mmm
Eso cambiaba las cosas totalmente, una enfermedad y cuidarla total y absolutamente como una paciente, eso realmente cambiaba las cosas.
-piénsalo hija, esto puede ser una muy buena oportunidad además el doctor carliste de inmediato confió en ti.
En realidad eso era mucho mejor de lo que esperaba, trabajar con un paciente, pero porque el doctor Carliste no contrataba a una enfermera realmente titulada para su hija, y no a una estudiante eso sí que me parecía extraño.
-perdóname, papá tu sabes cómo soy de apresurada en las cosas, de verdad tienes razón lo hare pero solo hasta cuando no encuentre otro trabajo ok.
-bueno hija me alegro,
-mañana debes ir al hospital y hablar con el doctor Carliste
Genial esa noche no pude dormir de los puros nervios, pensaba miles de cosas, como seria esa familia, que tendría que hacer, cuan enferma estaba la hija del prestigioso doctor Carliste y porque me tendría que elegir a mí, luego me daba vuelta en mi cama y me retorcía una y otra vez en mi mente mejor no lo acepto, luego otro pensamiento salía de mi mente no seas cobarde Bella esto te puede servir para muchas cosas, y así estuve toda la noche.
Me levante, me fui directamente al baño, me mire en el espejo y lo mal que dormí quedaba en total evidencia por mis pronunciadas ojeras, Sí, tendría que poner maquillaje, me duche y elegí muy bien la ropa que me pondría, una camisa cuadrille y unos jean además de mi chaqueta negra preferida, ya estaba lista para salir al hospital me llene de ánimo, Charlie ya no se encontraba en casa, el salía demasiado temprano, agradecí eso, necesitaba estar total y absolutamente sola para poder hacer esto, me alegre al ver estacionada en la parte de afuera mi hermosa camioneta un poco gastada pero igual andaba.
Llegue al hospital, había una recepcionista
-muy buenos días me dijo
-buenos días…bueno mmm, busco al doctor Carliste
-tienes hora con el dame tu nombre
-no yo en realidad….se escucho una voz
-Isabella Swan
Me di vuelta y ahí estaba el doctor Carliste, le dio las gracias a la recepcionista y me invito a pasar a su consulta.
-tu padre me acaba de llamar, en realidad coincidió con tu hora de llagada
-gracias.
-no, las gracias a ti por aceptar esto, Isabella
-bueno en realidad yo tengo muchas ganas de aprender y cualquier experiencia creo que servirá a mis estudios.
-bueno mi hija Alice es….
Note que sus ojos se llenaban de lágrimas y desviaba su mirada hacia una ventana, no lo sé, eso me produjo algo, tristeza. Repitió
-Es muy importante en la familia bueno ella está muy enferma, estoy haciendo estudios acerca de su enfermedad, a ella todo le produce debilidad se cansa de todo, de apoco está perdiendo su fuerza y bueno en realidad eso nos tiene completamente destrozados, por eso cuando Charlie me hablo de ti, se me ocurrió que podrías ayudar con Alice, ella me reclama siempre que yo le envió enfermeras de edad y que en realidad no puede hacer amistad como verdaderas amigas, bueno tú tienes edad como para alegrarle un poco el día, es solo eso, y te enseñare todo respecto a sus medicinas, no sé qué me dices.
Realmente eso me tomo por sorpresa, pero no me produjo ningún miedo como lo de anoche creo que sentí lo que se llama el llamado de la vocación de servicio, sentí unas ganas de estar con esa niña y acompañarla, que de inmediato se escapo de mi boca un rotundo.
-ok, no hay problema cuando puedo conocer a Alice, me devolvió una sonrisa llena de esperanza, eso me retorció el estomago
-Bueno ahora mismo, puedes esperarme, debo cambiar mi turno, tomo el teléfono y marco
-bajo en seguida, eso fue lo que dijo.
-Isabella me puedes esperar un poco
-ok, dije
Me quede en su consulta y no pude evitar mirar un cuadro en donde estaba toda su familia el señor y la señora cullen, ella una mujer muy hermosa y distinguida, en un costado un joven muy musculoso, ese debe de ser el hijo mayor, otro joven por el costado abrazando ambos a la que yo creo que debe ser Alice una joven muy hermosa que en sus ojos dejaba evidenciado que se encontraba enferma, que linda familia tenía el doctor Carliste, en eso escuche unos pasos.
-ya estoy listo Isabella vamos
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